Hoy es el Día del Cine Nacional en homenaje a la primera película argumental realizada en la Argentina. El 23 de mayo de 1909 se estrenó La Revolución de Mayo en el Teatro Ateneo de Buenos Aires. Aquel film fue dirigido por Mario Gallo y protagonizado por Eliseo Gutierrez, César Fiaschi y por el propio director. La película ficcionalizaba diferentes eventos propios de la gesta patriótica de 1810. Fue filmada en 35mm y en el año 2009, al conmemorarse su centenario, logró ser restaurada. Podemos visualizarla en INCAA TV: La Revolución de Mayo (film restaurado de 1909)
Nuestro cine nacional siempre se ha destacado en todo el mundo generando prestigio a nuestro país y orgullo a su pueblo. El sector cinematográfico produce y estrena cerca de 250 películas por año, a partir de una dinámica de fomentos inteligente y virtuosa. El sistema de fondos permite producir nuevas películas utilizando la recaudación de la venta de las entradas de aquellas películas en cartel. Así el circuito genera trabajo directo e indirecto para miles de personas en todo el país. Producto de este sistema consolidado y en expansión se fueron creando carreras de formación y estudios técnico profesional para seguir mejorando en conocimiento y calidad el trabajo en este sector. Así el cine nacional es sinónimo de arte, inclusión laboral, diversidad cultural, e identidades regionales y nacional.
Hoy nuestro cine se encuentra atravesando una crisis innecesaria que el actual desgobierno provoca mediante medidas de achicamiento del INCAA, el instituto público estatal encargado de las políticas que han propiciado que el sector audiovisual sea pujante. En este contexto resulta difícil celebrar el Día Nacional del Cine, pero sí es necesario seguir defendiéndolo.