La Revista Académica multidisciplinar sobre cine y audiovisual A barca, del Programa de Pós-Graduação en Cinema y Audiovisual de la Universidad Federal Fluminense, abre la convocatoria de artículos para su próxima dossier especial a publicarse en el primer semestre del 2026, coordinado por Cristina Alvares Beskow (UNICAMP), María Aimaretti (UBA) y Marina Cavalcanti Tedesco (UFF).
El dossier Entre generaciones: citas, genealogías, diálogos y encuentros entre trabajadoras e investigadoras/investigadores del audiovisual latinoamericano estará dedicado a reflexionar y polemizar sobre las limitaciones y potencias, desafíos pendientes y problemas que entrañan las relaciones entre diferentes generaciones de mujeres vinculadas al audiovisual en América Latina, tanto en lo que refiere al trabajo creativo, como a la labor investigativa. Esperamos recibir contribuciones que, poniendo el foco en las conexiones, continuidades y clivajes entre generaciones, nos ayuden tanto a mapear el estado de situación de nuestra agenda de investigación, como a proyectar lo que deseamos suceda en el porvenir.
Aquí encontrarán las directrices para autorxs: serán bienvenidas propuestas en portugués, español e inglés hasta el 22 de febrero de 2026.
Sobre el dossier:
Entre generaciones: citas, genealogías, diálogos y encuentros entre trabajadoras e investigadoras/investigadores del audiovisual latinoamericano
Hace poco más de diez años el interés por investigar a las mujeres en el cine y el audiovisual de América Latina comenzó a cobrar impulso en varios países da América Latina, Estados Unidos e Europa. Aunque el foco principal ha sido hasta ahora la dirección y la producción, lo cierto es que una nueva lectura historiográfica se abrió en paralelo al crecimiento y popularización del Movimiento Feminista en la región y el apoyo a la investigación científica por parte de diversas instituciones, estatales y privadas.
No sin resistencia y contradicciones, este movimiento de re-visión/re-escritura generó diversos cruces/“in-between” – entre clases, entre géneros, entre nacionalidades, entre idiomas/lenguas, etc. – que sacudieron metodologías y protocolos de acción académica. Entre ellos aquí nos interesa pensar y discutir las variadas conexiones inter-generacionales que se desplegaron como parte de las condiciones de posibilidad de una nueva agenda de desafíos. Justamente, a raíz del androcentrismo académico y de nuestras historias del cine, en buena parte de los escenarios nacionales no había (casi) nada escrito sobre las mujeres que queríamos estudiar, por lo que fue necesario, primero, buscarlas y convencerlas de la importancia de recuperar su experiencia. Y, luego, entrevistarlas y generar la confianza suficiente que nos permitiera acceder a sus obras y, con frecuencia, a sus archivos personales/familiares. El desborde virtuoso y espiralado de esta relación de complicidad y solidaridad fue que a medida que sus carreras se hicieron conocidas a través de ponencias, artículos, libros y entrevistas, otras mujeres involucradas en la producción y la exhibición audiovisual quisieron hablar con nosotras y compartir su trayectoria: habían encontrado oídos curiosos, y un espacio de interpelación que no por ser respetuoso caía en la condescendencia o la idealización. Y no solo crecieron esos vínculos intergeneracionales: si profesionales y técnicas del presente encontraron referentes del pasado que desconocían y que nombraban con lucidez sueños y desafíos comunes —en cierto modo eran “sus contemporáneas”–; colegas del mundo académico, descubrieron trayectorias que entraron en sinergia con deseos, intuiciones y conjeturas que por largo tiempo habían estado “en el closet”. De cierta manera las lenguas fueron dejando de estar en sordina, y cada vez hemos sido más las interesadas en prestar atención y afinar nuestra escucha a las mujeres que nos antecedieron, aún conscientes de las dificultades y vacíos que toda conversación entraña.
Pero hablar del “entre generaciones” en el campo de los estudios sobre audiovisual en América Latina requiere también visibilizar —en la mediana y larga duración– la cadena de mujeres que desde las Ciencias Sociales, las Humanidades y la Historia del arte nos han abierto el camino para mirar las imágenes y escribir historias con perspectiva de género. Es decir, reparar en esa otra genealogía —teórica, metodológica, pedagógica– que desde la Universidad, la ciencia y la gestión archivística, ha bregado paciente y apasionadamente durante muchos años por una agenda de investigación en la que los géneros y las sexualidades sí importen. Una agenda que cimente el zócalo de discusión para las generaciones que vendrían —y aquí estamos. Reconocerlas y honrarlas es parte de un ejercicio vital esencial: la memoria intelectual hacia nuestras inspiradoras.
El próximo número de A Barca estará dedicado, justamente, a reflexionar y polemizar sobre las limitaciones y potencias, desafíos pendientes y problemas que entrañan las relaciones entre diferentes generaciones de mujeres vinculadas al audiovisual en América Latina. Proponemos algunos ejes no excluyentes:
- Relaciones intergeneracionales entre mujeres que trabajan/trabajaron en la realización en el cine, el audiovisual y la TV latinoamericana a lo largo del siglo XX y el XXI, comprendiendo diferentes oficios y profesiones.
- Vínculos entre mujeres investigadoras y mujeres que trabajan/trabajaron en la realización en el cine, el audiovisual y la TV latinoamericano que pertenezcan a diferentes cohortes de nacimiento.
- Conexiones intergeneracionales dentro del campo académico entre investigadoras dedicadas al cine, el audiovisual y la TV latinoamericano.
- Asociación entre artistas/ docentes/ investigadoras, y mujeres familiares —madres, hijas, viudas– o albaceas, dedicadas al resguardo de archivos de profesionales del audiovisual en América Latina.
- Mujeres de diferentes generaciones vinculadas al audiovisual en América Latina retratadas en documentales recientes.
- Metodologías de investigación-acción colaborativas de carácter intergeneracional.
Esperamos recibir contribuciones que, poniendo el foco en las conexiones, continuidades y clivajes entre generaciones, nos ayuden tanto a mapear el estado de situación de nuestra agenda de investigación, como a proyectar lo que deseamos suceda en el porvenir, soñando, anticipadamente, con los diálogos que vendrán con las nuevas (nuevas) generaciones del siglo XXI.